Las misiones Apolo

p-05bLa puesta en órbita del Sputnik 1 en 1957 fue el acontecimiento inicial que impulsó a diversas naciones, principalmente a los EEUU y la entonces URSS, a conquistar el espacio y la idea de poner un hombre en la Luna se fue haciendo cada vez más grande y fuerte. Los primeros pasos, por el lado norteamericano, se dieron a través del programa Mercury en 1958, cuyo principal objetivo era poner en órbita terrestre una nave espacial, investigar la supervivencia del hombre en el espacio y recuperar a ambos de manera segura, y esto fue logrado con éxito el 20 de febrero de 1962, cuando a bordo de un cohete Atlas se llevó al espacio al astronauta John Glenn en la cápsula Friendship 7. Cabe recalcar que la cápsula Mercury solo podía ser tripulada por un astronauta en su interior.

La segunda fase del proyecto inició en 1962 con el programa Gemini que consistía en demostrar las posibilidades de encuentros espaciales y realizar pruebas de acoplamiento entre naves que serían utilizados durante el viaje a la Luna, para este programa, se modificó la capsula del Mercury, haciéndola más grande para transportar a dos astronautas, esta fase incluía maniobras que un solo astronauta no podría realizar, ya que tenían que desplazarse hacia adelante y atrás, cambiar la orientación de la nave, incluso su órbita, tenía que usar toda la capacidad de maniobra orbital para el reencuentro con otra nave. Fue en la cápsula de las naves Gemini donde se usaron las primeras computadoras a bordo para los complejos cálculos que facilitarían un acoplamiento exitoso.

Con esto se daba firmeza a los pasos del programa Apolo de la NASA que inició en mayo de 1961 cuando aún se hacían pruebas con los programas Mercury y Gemini. La ruta del Apolo abrió los horizontes a nuevos conocimientos, la construcción del colosal cohete Saturno V que, con tres tanques de combustible en tres diferentes etapas, permitió poner en diferente órbitas varios módulos para el alunizaje.

La primera misión Apolo tuvo un final trágico el 27 de enero de 1967, los astronautas designados para una prueba se internaron en el módulo de mando, y una vez dentro se suscitó un incendio. Virgil Grissom, Edward White II y Roger Chaffee no hubo la mínima intención de ser rescatados, en la cabina de control nunca se enteraron de lo que estaba sucediendo en el interior de la nave. Este fatal accidente puso en la cuerda floja a la misión y al proyecto entero.

Ninguna misión fue llamada Apolo 2, ni Apolo 3. Las Apolo 4, 5 y 6 fueron misiones de prueba no tripuladas, donde se usó un lanzador Saturno V como vehículo impulsor, con el objetivo de poner en órbita terrestre aproximadamente el 80 por ciento del modelo espacial Apolo, probar los escudos térmicos, sistemas de propulsión, permanecer en órbita de acomplamiento e ingravidez.

Una vez realizadas las pruebas de manera satisfactoria, se dio paso a las misiones tripuladas. La Apolo 7, fue lanzada el día 11 de octubre de 1968 con los astronautas Walter M. Schirra, Donn F. Eisele y Walter Cunningham, quienes probaron los sistemas de comunicaciones, el funcionamiento de la cápsula espacial del módulo de mando, hicieron una simulación de acoplamiento con el modulo lunar, probaron el encendido de motor para corrección de trayectoria, y por si fuera poco, realizaron la primera transmisión en vivo de las maniobras realizadas en el espacio.

p-05aLa Apolo 8 fue lanzada el 21 de diciembre de 1968, convirtiéndose en la primera misión tripulada en salir de órbita terrestre, orbitar a la Luna y finalmente regresar a la Tierra. Los tripulantes Frank Borman, James Lovell y William Anders fueron los primeros humanos en salir de la órbita baja terrestre, en ver a la Tierra completa, en ver el lado oculto de la Luna y los primeros en ver el amanecer de la Tierra desde la Luna. Tardó tres días en llegar a la Luna y la orbitó 10 veces en 20 horas, en este tiempo la tripulación realizó una transmisión televisada de Nochebuena en la cual leyeron los primeros 10 versos del Libro de Génesis.

En la Apolo 9, lanzada el 3 de marzo de 1969, los astronautas James McDivitt, David Scott y Rusty Schweickart, realizaron pruebas de maniobra para aterrizar en la Luna, incluyendo los motores del módulo lunar, los sistemas de soporte de vida de mochila, los sistemas de navegación y las maniobras de acoplamiento de dos naves con tripulación.

Las pruebas finales se llevaron a cabo con la Apolo 10, lanzada el 18 de mayo de 1969, con Thomas P. Stafford, John W. Young y Eugene A. Cernan como tripulantes. Esta misión tenía como objetivo realizar pruebas de acoplamiento entre el módulo de mando y el módulo lunar estando en la órbita de la Luna. La misión incluía fotografiar la superficie de la Luna a una altura aproximada de 15 km para ubicar una zona de alunizaje. Una vez realizadas las pruebas, los astronautas se concentraron en el módulo de mando, mientras el módulo lunar era lanzado hacia el Sol para liberar peso y así poder llegar a órbita terrestre e ingresar a la atmósfera.

El 16 de julio de 1969 fue el día memorable, tres astronautas se prepararon para subir al cielo y alcanzar lo inalcanzable. El compromiso del presidente de los Estados Unidos de América de llevar un hombre a la Luna y traerlo de vuelta a la Tierra sano y salvo estaba llegando a su fecha límite y justo antes de cumplirse la década la Apolo 11 lo hizo realidad. Los astronautas Neil A. Armstrong, Edwin E. Aldrin Jr. y Michael Collins, partieron de la Tierra con destino a la Luna, después de tres días de viaje y de orbitar a ambos cuerpos, el 21 de julio, Armstrong puso el primer pie sobre la Luna, mencionando la frase célebre “Un pequeño paso para el hombre, un gran salto para la humanidad”. Acompañado de Aldrin recolectaron muestras del suelo y rocas lunares, instalaron equipos para hacer lecturas sísmicas y un reflector láser. Estuvieron en la Luna un poco más de dos horas. La misión no fue del todo fácil, el comandante de la misión, Michael Collins, realizó diversas maniobras en modo manual para garantizar el alunizaje y el regreso a casa.

La Apolo 11 no fue la única misión que se posó en el suelo lunar. La Apolo 12 lanzada el 14 de noviembre de 1969 con los astronautas Charles “Pete” Conrad y Alan L. Bean realizaron poco más de un día y siete horas de actividades en la superficie lunar, mientras que el piloto del módulo de comando Richard F. Gordon permaneció en órbita esperándolos. Recolectaron muestras lunares además de algunas piezas de la sonda Surveyor 3, pero la novedad de esta misión fue que se realizó una transmisión con cámara a color, dicha transmisión se interrumpió cuando el astronauta Alan Bean apuntó de manera accidental hacia al Sol descomponiéndola.

De entre todas las misiones que tenían el objetivo de alunizar sólo una no pudo cumplir con su cometido, la Apolo 13. En camino a la Luna explotó de un tanque de oxígeno en el módulo de servicio, lo que obligó a los astronautas a bordo a realizar maniobras de sobrevivencia para regresar con bien a la Tierra.

Las misiones Apolo 14 a 17 alunizaron exitosamente, trayendo de regreso a la Tierra varios kilogramos de material lunar para su estudio, instalaron equipos experimentales y, en la Apolo 15, se utilizó el primer vehículo de exploración lunar y se colocó un primer subsatélite en órbita lunar. La Apolo 16, por su parte, se usó como un observatorio astronómico, y la última misión, la Apolo 17, fue la que rompió varios récords: el aterrizaje más largo en la Luna, las actividades extravehiculares totales más largas, la muestra lunar más grande de todas las misiones Apolo y el tiempo más largo en la órbita lunar, además de la primera participación de un científico (geólogo) en una misión espacial.

Estos logros científicos y tecnológicos se lograron gracias a muchas mujeres y hombres que dieron el mayor esfuerzo, tiempo y algunos incluso su vida para poder mejorar cada una de las etapas, se corrieron demasiados riesgos, pero valió la pena. Seguirán impulsando y motivando a nuevas generaciones a llegar más lejos, al vecino más próximo, Marte, y muchos estaremos ahí, recibiendo imágenes e información con gran júbilo.

 

* Jatamatzá Club Astronómico, [email protected]