El Hubble y la salud

Me parece increíble que poca gente, en el ámbito común, sepa lo mínimo del telescopio espacial Hubble, que tiene este nombre en honor al astrónomo Edwin Powell Hubble (1889 – 1953). Puesto en órbita el 24 de abril de 1990, es un proyecto conjunto entre la Agencia Espacial Europea y la NASA.

La atmósfera terrestre actúa como una especie de filtro que distorsiona la visualización de los objetos en el espacio y no se pueden ver con toda claridad. Si a esto se le suma la dinámica en la atmósfera, como turbulencias, absorción de ondas electromagnéticas, contaminación lumínica y muchos otros factores, tenemos desde la Tierra una visión particularmente parcial del universo.

El telescopio Hubble, que se encuentra apenas a 593 kilómetros sobre el nivel del mar (la distancia de Veracruz a Acapulco es de 671 kilómetros, lo que nos hace ver que realmente no se encuentra a una altura tan significativa como podríamos suponer), ha permitido obtener imágenes verdaderamente sorprendentes del cosmos. Una particularmente famosa es “los pilares de la creación”, que muestra, a una distancia de 7 mil años luz de la Tierra, una fotografía realmente espectacular que seguramente se habrá tomado como fondo de pantalla en innumerables computadoras o teléfonos celulares.

Pero en general, la investigación espacial, que es particularmente cara y para muchos hasta extravagante, nos ha brindado elementos sorprendentes e inimaginables que van mucho más allá del “velcro” que se utilizó en la misión Apolo, durante la que se plasmó la primera huella del hombre en la luna.

La necesidad de mejorar los elementos de visualización espacial, han tenido como reflejo, una impresionante capacidad de avance en la tecnología de aparatos para llevar a cabo diagnósticos médicos. Podríamos afirmar categóricamente que en la misma forma en la que nos hemos esforzado por ver el universo, hemos alcanzado un inconmensurable avance en la visualización del interior del cuerpo humano. Esta evolución no solamente se da en función de la mejora de aparatos sino de la evolución del software, es decir, la compleja programación de computadoras para poder establecer procesos automatizados que se reflejan en la mejoría de las imágenes, alcanzando niveles realmente impresionantes.

Gracias a la investigación generada por este telescopio, es posible utilizar micro-endoscopios, que son instrumentos muy pequeños que por medio de fibras ópticas, permiten la realización de cirugías muy poco invasivas.

Otro avance en el ámbito de la medicina son los “Dispositivos de Carga Acoplada” o CCD, acrónimo del inglés charge-coupled device, que es un circuito integrado que se utiliza en cámaras digitales dentro de muchas otras aplicaciones y que, en medicina, permiten hacer biopsias utilizando simplemente agujas en lugar de hacer operaciones, por ejemplo, en las mamografías.

En oftalmología, el “escaneo” y medición de aberraciones oculares permite realizar con una impresionante precisión, cirugías con rayos láser o incluso, valorar el ajuste de lentes de contacto, gracias a las diferentes pruebas que se hacen con los espejos de telescopios orbitales.

Los LED o Diodos Emisores de Luz que se utilizan en la Estación Espacial Internacional, para hacer crecer plantas en pequeños invernaderos y que regulan la emisión de calor, actualmente se emplean, no solamente para tratar dolores crónicos evitando la utilización de medicamentos y sus consecuentes efectos secundarios sino que también han dado lugar a termómetros que, en forma de pastillas, ayudan a monitorear las temperaturas internas de astronautas y deportistas de alto rendimiento que, sometidos a temperaturas extremas de calor, podrían tener graves riesgos en generar problemas de salud.

Las cubiertas térmicas que envuelven a los satélites como el Hubble, actualmente se usan como mantas de emergencia. Denominadas “mantas isotérmicas”, evitan que una persona pierda calor y también protege al cuerpo de tener sobrecalentamientos. En personas accidentadas, mantiene la temperatura corporal estable y representa un auxiliar muy valioso en la búsqueda de alcanzar un equilibrio de individuos que si bien, en el pasado eran transportados por ambulancias a los hospitales más cercanos, ahora pueden permitir a los paramédicos, ganar tiempo y establecer traslados a los hospitales más adecuados.

Los seres humanos enfrentamos cotidianamente retos ante problemas generados por una especie de inconciencia ante el futuro. No sabemos qué consecuencias tendrán las acciones que llevamos a cabo en el ahora con respecto a lo que sucederá. Buscamos la manera de vivir mejor sin tener en cuenta cuáles serán los efectos a la larga en este proceso en el que nuestra inteligencia y aprendizaje, no va a la par con los enormes problemas que tendremos que resolver.

La investigación espacial genera conocimientos exorbitantemente caros que muchas veces no están al alcance de las mayorías, pero tampoco podemos menospreciar la labor de científicos que en una forma, no necesariamente guiada por el beneficio económico, nos entregan generosamente avances tecnológicos que nos brindan una forma de vida que no podíamos haber imaginado hace apenas unos años. En este sentido, por citar un ejemplo que todos podemos percibir, es esa posibilidad de que, casi cualquier persona, independientemente del nivel socioeconómico, tenga acceso a un teléfono celular.

Constituimos una especie particularmente curiosa que busca respuestas a interrogantes que siendo aparentemente simples nos envuelven en problemas filosóficos cuya resultante es extraordinariamente diversa y particularmente rica.

El telescopio espacial Hubble pronto dejará de funcionar; pero esto no representará una tragedia, pues será sustituido por otro que permita un mejor conocimiento de nuestro universo.

Teniendo en cuenta lo anterior, considero que efectivamente debemos de agradecer a todos aquellos involucrados en la investigación espacial, la posibilidad de aspirar a vivir en un mundo lleno de retos, pero también, pletórico de desafíos que muestran la maravilla de la naturaleza en el más ínfimo detalle microscópico, o la grandiosidad de una fotografía tomada por un telescopio espacial.

 

* [email protected]