Precariedad laboral académica

En el presente siglo, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) se masificó en condiciones de reducción presupuestal, contención salarial y precariedad en las condiciones laborales académicas: entre 2002-2003 y 2019-2020, la matrícula escolar aumentó 118 por ciento en tanto que la planta académica lo hizo en 39 por ciento, en esos 17 años, los profesores de carrera (tiempo completo y medio tiempo) aumentaron 5 por ciento y los profesores hora clase lo hicieron en 124 por ciento, mientras tanto, el subsidio público ordinario (estatal y federal) por alumno de educación superior que en el año 2000 era de 56 mil 500 pesos constantes del año 2013 en 2019 fue de 49 mil 800 pesos constantes, la contracción del subsidio fue de 12 por ciento y para el año en curso será de 20 por ciento. El salario tabulado real de un profesor titular en 2019 era tan solo 42 por ciento respecto al existente en 1978, como lo refiere Germán Sánchez Daza en su ponencia Salarios y Condiciones Laborales en la UAP (20 marzo 2021).

El deterioro del salario académico se compensó con una política de estímulos a la productividad a través de dos programas: Sistema Nacional de Investigadores (SNI, 1984) y el Programa de Evaluación y Estímulos al Desempeño del Personal Docente (ESDEPED,1997), dichos programas excluyen a los profesores hora clase (46 por ciento de la planta académica de la BUAP en 2019) y del total de profesores de carrera (2 mil 770 en 2019), solo 57 por ciento accedió al ESDEPED y 25 por ciento al SNI: dos de cada cinco profesores de carrera no está incorporado al programa de estímulos y tres de cada cuatro no pertenece al SNI. De la planta académica registrada en el ciclo escolar 2019-2020 solo 13 por ciento dispone, además de su salario tabulado, de un doble estímulo por productividad (ESDEPED y SNI), 17 por ciento accede a un solo estímulo (ESDEPED) y percibe además su salario base y 70 por ciento dispone únicamente de su salario base, la mayoría de éstos son los profesores horas clases.

El salario tabulado promedio de una plaza de profesor titular de tiempo completo (sin considerar estímulos) es nueve veces más alto que el salario promedio de una plaza de profesor hora clase, según estimación del profesor Germán Sánchez Daza; para compensar la desvalorización de su trabajo docente, el profesor hora clase tiene en promedio 1.9 plazas. Según esta misma fuente, el total de horas clases impartidas por los docentes de asignatura supera la dictada por los profesores de carrera y más de la mitad de los profesores de asignatura imparte 20 horas o más a la semana. La masificación de la matrícula de nivel medio superior y de licenciatura se ha solventado, en su mayor parte, con los profesores de asignatura. La élite (profesores de carrera reconocidos con estímulos a la productividad) son el soporte de los casi 100 programas de posgrado impartidos actualmente, la mayoría de ellos, incorporados en el Padrón Nacional de Posgrados de Calidad.

Fue durante la gestión de Enrique Agüera cuando disminuyeron los profesores de carrera y aumentaron los de hora clase: en el ciclo escolar 2002-2003 eran 247 profesores de carrera por cada cien profesores hora clase, en 2019-2020, eran 116 profesores de carrera por cien horas clase. La relación alumnos por profesor de carrera también se modificó: 18 alumnos en 2002-2003 y 38 alumnos en 2019-2020. A todo el personal docente se le ha aumentado las horas pizarrón y también el número de alumnos por grupo. Lo más dramático es la situación de los profesores de asignatura, que por lo general trabajan en dos unidades académicas y cada semestre cambian la materia que imparten, no les pagan todos los meses del año, tampoco tienen derecho a descargas por superación académica o estancias sabáticas, no tienen cubículo propio y les regatean los viáticos para asistir a seminarios o congresos académicos.

No todas las plazas de profesores de tiempo completo son reconocidas por el Programa para el Desarrollo Profesional Docente de la SEP, en nuestro caso, en el ciclo escolar 2019-2020 reconocían al 91 por ciento de los profesores de tiempo completo; del total reconocido, 94 por ciento tiene estudios de posgrado, dos terceras partes de los reconocidos tiene el perfil deseable por ese programa, la mitad forma parte del Padrón de Investigadores y un tercio de los reconocidos pertenece al SNI. Ha sido significativa la superación académica de la planta: los profesores de tiempo completo que tienen el perfil deseable PROMEP aumentaron 247 por ciento entre los ciclos 2019-2020 y 2002-2003, los que pertenecen al Padrón de Investigadores lo hicieron en 137 por ciento y los que pertenecen al SNI aumentaron 211 por ciento entre ambos ciclos escolares.

Los estímulos a los que accede solo el 30 por ciento de la planta académica de la BUAP no forman parte del salario universitario y al dejar de ser productivos o activos, se pierden. Para el personal académico que recibe doble estímulo (13 por ciento de la planta) puede llegar a representar dos tercios de su ingreso y el carecer de la totalidad de este ingreso en la causa del envejecimiento de la planta y la ausencia de movilidad generacional en muchas instituciones de educación superior públicas, no en la nuestra, donde las plazas de los jubilados, fenecidos o renunciantes se congelan: Francisco Vélez Pliego explicó en el Cuarto Informe de su segunda gestión al frente del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades Alfonzo Vélez que en los últimos ocho años perdieron 36 plazas por decesos, jubilaciones o renuncias y de éstas, sólo pudieron crear el 70 por ciento de las plazas.

Hay demandas laborales compartidas por las plantas académicas de las universidades públicas. En nuestro caso, hay medio millar de profesores de tiempo completo que teniendo el grado de doctor no forman parte del SNI, ahí la estrategia es crear las condiciones ad hoc para que generen los productos suficientes para que sean considerados; hay 709 maestros de tiempo completo con grado de maestría que a través de un programa de superación pueden acceder al de doctor, y de los 2 mil 357 profesores contratados por asignatura hay varias exigencias: retabulación salarial; promoción de aquellos que siendo definitivos y teniendo las acreditaciones exigidas, pueden ocupar plazas de tiempo completo Titular o Asociado y un mejor entorno para su desarrollo profesional (cubículos, participación en cuerpos académicos, congresos, seminarios, estancias sabáticas).

 

* [email protected]