Parecería que los astrónomos se dedican únicamente a observar el cielo; sin embargo, en su búsqueda de cielos oscuros libres de contaminación lumínica y con condiciones climatológicas adecuadas han encontrado sitios de gran riqueza natural, donde han instalado sus telescopios y de manera “natural” han promovido la conservación de la biodiversidad. Por ejemplo, el Observatorio Astronómico Nacional (OAN) se localiza en el Parque Nacional de San Pedro Mártir, Baja California, y el Parque Nacional Pico de Orizaba alberga el Gran Telescopio Milimétrico “Alfonso Serrano” y el Observatorio de Rayos Gamma de Gran Altura HAWC, o High Altitude Water Cherenkov.
El Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE) opera el Observatorio Astrofísico Nacional “Guillermo Haro” (OAGH), localizado en la Sierra de La Mariquita, cerca de Cananea, Sonora, y hace unas semanas, en reconocimiento al esfuerzo por preservar los ecosistemas y la biodiversidad en las 2 mil 195 hectáreas de su propiedad, recibió un certificado por el cual se designa a esta sierra como Área Natural Protegida Destinada Voluntariamente a la Conservación.
Este certificado fue expedido en días pasados por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, a través de la Comisión Nacional de Áreas Protegidas (CONANP) a favor nuestro instituto.
La Mariquita es parte de un importante corredor biológico de 65 formaciones montañosas en la zona fronteriza de Sonora, Arizona y Nuevo México, conocido como “Archipiélago de Islas del Cielo”, cuyas características únicas permiten el refugio y la conservación de especies relevantes de flora y fauna, ecosistemas importantes y la prestación de servicios ambientales para conservar el suelo, el agua y el cielo limpios en beneficio de la población.
La Mariquita, así como La Elenita, Los Ajos y otras sierras aledañas que forman parte del citado “Archipiélago”, son especialmente importantes como fuentes receptoras de agua en el nacimiento de las cuencas hidrológicas de los ríos Sonora, San Pedro y Magdalena.
La vegetación de La Mariquita se compone de pastizales, matorrales xerófilos, encinares y pinares, y destaca por un pino frondoso denominado Ayacahuite, el álamo temblón y el insecto coloquialmente denominado en la región como mariquita o catarina, al que debe su nombre.
La fauna está integrada por una gran variedad de especies, muchas de ellas con protección especial, en riesgo o en inminente peligro de extinción como la serpiente coralillo sonorense, el gato montés, el oso negro, la víbora de cascabel o el águila cabeza blanca.
El INAOE ha sido pionero en Cananea no solo en la preservación de los ecosistemas, sino también en temas de protección de los cielos oscuros. Se han desarrollado a lo largo de varios años, junto con las autoridades y empresarios de la región, estrategias para prevenir la contaminación lumínica en la zona, ya que para la astronomía los cielos oscuros son fundamentales. Este tema también tiene, por supuesto, repercusiones ambientales importantes, ya que muchas especies dependen de la oscuridad para sus ciclos vitales.
El certificado de la CONANP es un reconocimiento a los trabajos realizados por el INAOE para proteger la zona, pero que también representa un compromiso a futuro que el Instituto asume no solo con responsabilidad, sino con mucho entusiasmo. Es importante que se involucre en este esfuerzo a los científicos, los empresarios, las autoridades municipales y a toda la sociedad de Cananea porque La Mariquita es un patrimonio importante para las generaciones presentes y futuras.
A partir de 2011 el INAOE emprendió un programa de reforestación ambicioso: junto con el Departamento de Ecología de Buena Vista del Cobre de Grupo México se han sembrado más de 3 mil árboles de especies nativas por año, contando con el apoyo de CONAFOR, Grupo México y Minera María. En la reforestación han participado trabajadores del Observatorio, así como mineros y sus familiares, y estudiantes de diversas instituciones de México y Estados Unidos.
Además de la reforestación con diversas especies, también se han instalado bebederos para venados y otros animales. Son grandes los retos porque hay mucha caza furtiva y se espera que este nuevo marco legal robustezca todas las acciones que se han emprendido por parte de la delegación del INAOE en Cananea.
Por otra parte, es importante remarcar que para el Instituto resulta trascendente que, junto con la emisión del certificado como Área Destinada Voluntariamente a la Conservación, la CONANP reconozca explícitamente la característica relevante de investigación científica en La Mariquita, ya que los trabajos no solo han servido para el conocimiento del cosmos, sino para la interpretación de los orígenes, desarrollo y evolución en los aspectos físicos y biológicos de nuestro planeta.
El Certificado contiene los instrumentos y herramientas para participar en los programas institucionales y de organismos internacionales para llevar a cabo las tareas de protección y conservación de suelos, captación de agua, reforestación permanente y protección de especies. Se cuenta con la estrategia de manejo, dividida en la zona de amortiguamiento y la zona de conservación, así como con un reglamento interno con las disposiciones generales y las acciones particulares permitidas y prohibidas para todas las áreas, que incluyen los accesos restringidos y regulados a La Mariquita; la protección de todas las especies de flora y fauna contra todos los agentes que las impacten y amenacen, y el impulso e implementación de amplias campañas de difusión y promoción de alianzas con la sociedad civil.
El certificado es un reconocimiento para el INAOE pero que también implica serias responsabilidades, como intensificar las acciones de protección de la flora y la fauna orientadas a prevenir la erosión del suelo, revertir la pérdida de suelo fértil y restaurar la capa vegetal. También se continuará con el mantenimiento de caminos y brechas para prevenir incendios. El acceso se mantendrá restringido y la cacería sigue estando estrictamente prohibida. El uso público de algunas áreas será para fines de la realización de cursos, talleres de divulgación e investigaciones científicas organizadas y autorizadas por el INAOE.
Para cerrar, se debe reconocer el impulso de la Dirección General y el trabajo de la Delegación del INAOE en Cananea, pero muy en particular el trabajo y gestiones del M.C. Gustavo Escobedo, Jefe de la Delegación y del Mtro. Patricio Estévez Nenninger, Gestor Ambiental del INAOE, a través de los cuales se ha logrado el Certificado de área protegida.
El INAOE ya no solo tiene como objetivo la investigación científica y la preservación del cielo limpio para lograr la transparencia óptima del cielo, indispensable para las observaciones astronómicas; ahora también debe conservar la flora y fauna en las 2 mil 195 hectáreas de los terrenos del OAGH. Conservar el cielo y conservar el suelo.