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Tres años de gobierno

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Para quien informa cotidianamente, hacer cuatro informes de gobierno al año es gratificante, sobre todo si son en plaza pública y con localidades agotadas. Los concurrentes van por iniciativa propia a refrendarle su apoyo, gratitud y lealtad a su dirigente y guía espiritual, quien se sigue ubicando muy arriba del partido que cofundó en 2014, cuyo lema siga siendo: La esperanza de México. La economía no ha sido ni será el mejor aporte de su proba y eficiente gestión, caso contrario a los múltiples logros sociales, fiscales, educativos y de emancipación ciudadana.

En el año en curso, el Producto Interno Bruto (PIB) a precios constantes habrá crecido por primera vez en la gestión de Andrés Manuel López Obrador, no lo suficiente para remontar las caídas de 2019 y 2020, pero sí al menos lo necesario para recuperar 4.2 millones de empleos perdidos por la pandemia y la crisis económica de 2020. El PIB del año en curso puede ser 2.7 menor al que hubo en 2018 y en 2024, al final de la gestión de AMLO, es probable que sea 7.6 por ciento más alto con relación al último año de Enrique Peña Nieto (EPN); en lugar del prometido 4 por ciento de crecimiento anual podemos tener un discreto 1.2 por ciento de crecimiento anual del PIB a precios constantes.

El PIB por persona a la mitad del sexenio de AMLO será 5.4 por ciento menor al de 2018 —con Felipe Calderón Hinojosa (FCH) fue de -6.3 por ciento a mitad de su gestión— y probablemente sea hasta 2023 cuando el PIB por persona iguale al que hubo al final de la gestión de EPN; al acabar el sexenio de AMLO, el producto por persona habrá aumentado 2 por ciento en seis años —con FCH el crecimiento sexenal fue de 1.5 por ciento. Las proyecciones de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público registran un crecimiento del PIB de 3.4 por ciento promedio anual para la segunda mitad del sexenio de AMLO y en estos momentos, aunque la inversión foránea ha aumentado (la directa y la de cartera), hay un decremento del índice de formación bruta de capital, el cual en agosto de 2021 se ubicó 5.5 por ciento abajo del nivel registrado en agosto de 2018. Las finanzas públicas no ofrecen expectativas alternas: el déficit público se mantendrá, respecto al PIB, en tres puntos; el ingreso presupuestario en 22 puntos: el gasto público total en 25 puntos: el gasto programable en 18 puntos y la deuda pública en 50 por ciento del PIB. La inflación es un problema emergente y esa situación, correlacionada con la globalización de nuestra economía (70 por ciento del PIB son importaciones y exportaciones) quizá conlleve modificaciones en las funciones del Banco de México y en su autonomía.

La doble crisis de 2020 produjo una contracción del personal ocupado de 4.19 millones respecto a 2019, no obstante, esta reducción del 7.6 por ciento, la masa salarial solo se redujo en 2.9 por ciento, ya que el salario mínimo a pesos constantes se incrementó en 13 por ciento en 2019 y en 16.3 por ciento en 2020. Los sucesivos incrementos en términos reales al salario mínimo durante la gestión de AMLO permitieron que, a mitad de su gestión, la masa salarial haya aumentado 9.1 por ciento en términos reales cuando la población ocupada sólo creciera en 3.3 por ciento. En tres años se han creado 1.8 millones de empleos.

A mitad del sexenio de FCH (al tercer trimestre) las personas ocupadas que tenían acceso a prestaciones habían aumentado en 12 mil 705; con EPN el incremento fue de 1 millón 562 mil 167 y con AMLO, de 1 millón 646 mil 366. La variación trianual en por cientos de las personas ocupadas durante la primera mitad de la gestión de FCH fue de 4.6; de 2.3 con EPN y de 3.3 con AMLO. Las personas en desempleo abierto (desocupados, disponibles y subocupados) aumentaron en 20.2 por ciento en la primera mitad de la gestión de FCH; disminuyeron en 1.9 por ciento con EPN y aumentaron en 53.6 por ciento en la gestión de AMLO. En todos los casos, los datos corresponden al tercer trimestre, la fuente es la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del Inegi de los años 2006, 2009, 2012, 2015, 2018 y 2021.

El salario mínimo real disminuyó, en la primera mitad de la gestión de FCH, en 1.3 por ciento; en el mismo periodo de EPN aumentó 3.2 por ciento, y en la primera mitad de AMLO ha aumentado en 41 por ciento en términos reales. La masa salarial (el ingreso salarial de las personas ocupadas) en pesos constantes disminuyó en 3.9 por ciento en la primera mitad de la gestión de FCH; con EPN aumentó 0.7 por ciento en los primeros tres años y con AMLO el crecimiento trianual fue de 9.1 por ciento, incluida la doble crisis. El salario promedio por persona ocupada, en términos reales, disminuyó en 8.1 por ciento en la primera mitad de la gestión de FCH, también disminuyó con EPN en 1.5 por ciento y con AMLO aumentó 5.6 por ciento. El ingreso salarial por habitantes, en términos reales, disminuyó en 7.7 por ciento y en 2.5 por ciento en las primeras mitades de las gestiones de FCH y EPN, respectivamente, en cambio, con AMLO, la variación trianual fue de 6.7 por ciento.

Al tercer trimestre de 2021 la población ocupada que percibía entre cero a dos salarios mínimos fue de 36.79 millones cuando en 2018 fue de 27.13 millones, aumentó 9.66 millones; expresado como porcentaje de la población ocupada pasó de 50.2 en 2018 a 65.9 en 2021, lo que estaría indicando una acelerada pauperización salarial. Nominalmente el salario mínimo creció 60 por ciento entre 2018 y 2021 en tanto que los salarios contractuales lo hicieron en 13.5 por ciento (en el mismo porcentaje que la inflación); el ingreso salarial nominal expresado en número de salarios mínimos disminuyó 29 por ciento entre 2018 y 2021, es decir, una persona ocupada que en 2018 percibía el equivalente a 2.82 salarios mínimos, en 2021 estará percibiendo 2.0 salarios mínimos, en número de salarios mínimos habría perdido poder de compra pero expresado en poder adquisitivo real, sería el mismo porque el salario mínimo aumentó en términos reales 41 por ciento entre 2021 y 2018, por lo tanto, lo que una persona ocupada que ganaba 2.82 salarios mínimos podía adquirir en 2018 equivale al poder de compra de dos salarios mínimos de 2021. Las personas ocupadas que en 2018 percibían entre dos y tres salarios mínimos fueron 9.8 millones, muchas de ellas aparecen en 2021 como recibiendo dos salarios mínimos: una persona ocupada que en 2018 ganaba 7 mil 575 pesos nominales (equivalente a 2.82 salarios mínimos), en 2021 ganará 8 mil 597 pesos si el incremento a su salario nominal (13.5 por ciento) fuera equivalente a la inflación, expresado en número de salarios, tal ingreso es de dos salarios mínimos. En cualquiera de sus expresiones, el ingreso salarial a pesos constantes (salario mínimo, masa salarial, ingreso promedio por ocupado, ingreso salarial por habitante) de 2021 es superior al de 2018.

Comparadas las dos gestiones anteriores a mitad de su sexenio, la de AMLO es donde el poder de compra del salario ha aumentado, lo que aunado a los extensivos programas sociales que en sólo dos de ellos (Adultos mayores y Becas educativas) atienden a 19 millones de personas, y al envío histórico de remesas (127 mil millones de dólares entre 2019 y 2021), han permitido mejorar el consumo de la población de menores ingresos.

La acción delictiva se ha contenido en la primera mitad de la gestión de AMLO, aunque algunas están al alza (feminicidios); la cobertura universal de los servicios de salud avanza y el gasto público en salud ha aumentado en términos reales (cuatro puntos del PIB); la pandemia se ha enfrentado con seriedad, profesionalismo y eficiencia y a la fecha del tercer año de gobierno se había vacunado a 86 por ciento de los adultos (15 por ciento con medio esquema, 85 por ciento con esquema completo) y las dosis aplicadas fueron 132.6 millones de vacunas; la probidad y combate a la corrupción se estima en ahorros por 1.4 billones de pesos en el trienio, casi dos puntos del PIB por año, dinero con el cual se ha financiado la obra pública y ampliado el gasto programable.

 

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