Trabajas y te vas (visas H)

La sociedad norteamericana requiere permanentemente de las habilidades y talentos de ciudadanos de otras nacionalidades para satisfacer sus necesidades de producción de bienes y servicios y de reproducción social; para ello otorga diversos tipos de visa de inmigrante y no inmigrante, los primeros tienen el derecho de residir por vida en los Estados Unidos (EE. UU.), los segundos, son estancias temporales. Entre la diversidad de visas de no inmigrantes otorgadas por las autoridades de ese país en sus oficinas consulares está la otorgada para trabajar temporalmente, las llamadas visas tipo H, que incluyen las concedidas a quienes tienen habilidades especiales (H1B), a los profesionales del Tratado Comercial con México y Canadá (H1B1), a las enfermeras de áreas de escasez (H1C), a los trabajadores agrícolas (H-2A), a los trabajadores no agrícolas (H-2B), aprendices (H3) y a las parejas e hijos de los trabajadores temporales mencionados (H4). Las visas H, por su cuantía, no son las principales visas de no inmigrantes otorgadas por el gobierno de ese país: durante el segundo periodo de la gestión presidencial de B. Clinton, fue de 3.5 por ciento; con George W. Bush, 5.7 por ciento; con B. Obama bajó a 4.4 por ciento; con D. Trump subió a 7.1 por ciento y en el primer año del actual gobierno fue de 16.9 por ciento. Una política avalada y practicada por demócratas y republicanos norteamericanos es otorgar un número de visas H menor a las necesidades laborales demandadas por la sociedad de ese país, lo que induce a la permanencia y al ingreso no documentado, problemas abordados por Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en su reciente reunión bilateral en Washington D.C.

En esa visita oficial, AMLO planteó la regularización de los inmigrantes, tanto de los que ya residen en EE.UU. como los que cada año ingresan, y solicitó un aumento de las visas temporales de empleo (H) para Honduras, Guatemala, El Salvador y México. En la conferencia de prensa del pasado 26 de julio, el canciller Marcelo Ebrard reconoció que las visas para trabajadores no agrícolas (H-2B) de los países mencionados habían aumentado en 55 mil para este año, de las cuales, 42 mil serán para mexicanos según los datos de la Oficina de Asuntos Consulares del Departamento de Estado del gobierno norteamericano (OAC). Del total de visas para no inmigrantes otorgadas por EE. UU. a mexicanos, las de trabajadores temporales fueron apenas 4.3 por ciento durante la segunda gestión presidencial de B. Clinton; se duplicó a 8.3 por ciento durante la gestión de Bush hijo; fue de 9.1 por ciento con Obama; se duplica con Trump a 18.8 por ciento y, en el primer año de Biden fue de 34.5 por ciento. Con datos de la OAC, el promedio anual (años fiscales) de visas tipo H otorgada a mexicanos entre 1997-2000 fue de 44 mil 285; entre 2001-2008, de 98 mil 719; entre 2009-2016 de 123 mil 395; entre 2017-2020 llegó a 244 mil 263; en 2021 fueron 314 mil 215 y para este año, según el canciller Ebrard, serán 356 mil. Las visas de trabajo temporal para mexicanos han aumentado significativamente pero son insuficientes; durante los dos primeros años de la gestión de Joe Biden es probable que las visas H otorgadas a mexicanos lleguen a 670 mil, lo que cubriría casi dos tercios del flujo laboral temporal de mexicanos, faltarían casi 400 mil para satisfacer las exigencias del mercado laboral norteamericano.

El otorgamiento de visas temporales de trabajo (H) refleja los cambios en el mercado laboral norteamericano: a fines del siglo pasado y en el primer decenio de este siglo, siete de cada 10 visas H emitidas por las autoridades norteamericanas fueron para trabajadores especializados, con Trump fueron cinco de 10 y en el primer año de Biden una de cuatro; situación adversa a las visas para trabajadores agrícolas (H-2A): 11 por ciento durante las gestiones de Clinton y Bush hijo, 21 por ciento con Obama, 35 por ciento con Trump y 55 por ciento en el primer año de Joe Biden. Las visas temporales para trabajos agrícolas se han otorgado, en más de 90 por ciento, a mexicanos, las del trabajo no agrícola la cubren también mexicanos en un rango de 59 por ciento (B. Clinton) a 75 por ciento (Trump y Biden), no es así en las visas para trabajos especiales, las cuales se otorgan a mexicanos en un rango de 1.6 por ciento (Trump) a 7.1 por ciento (Bush hijo). Un planteamiento plausible del gobierno de AMLO es la calidad de las visas, no tan sólo pedir su incremento, lo cual necesario, sino solicitar que aumenten las visas de trabajo especializado, que son de mayor nivel salarial.

Las visas de trabajo temporal otorgado a mexicanos por parte del gobierno norteamericano se han perfilado hacia el trabajo no calificado: Durante el segundo periodo de B. Clinton, una de cada 10 visas fue para trabajadores especializados; con Geoge W. Bush eran una de cada seis; con Barack Obama fueron una de cada 20 y con Trump y el primer año de Joe Biden, fueron menos de 2 por ciento. Las visas para mexicanos ocupados en actividad agrícolas (H-2A) fueron una de cada dos con Clinton; una de cada tres con Bush hijo; seis de cada 10 con Obama y tres de cada cuatro con Trump y Biden; se ha bracerizado el otorgamiento de visas para mexicanos. Las visas para trabajos no agrícolas (H-2B) fueron entre 40 y 50 por ciento durante las gestiones de Clinton y Bush hijo, 34 por ciento con Obama y 25 por ciento con Trump y Biden (2021).

Con la crisis económica de 2020 y la pandemia del SARS-COV2 la actividad económica se contrajo, la frontera de EE.UU. se cerró casi dos años y el otorgamiento de visas para no inmigrantes de todas las nacionalidades se redujo en 68 por ciento y para mexicanos en 38 por ciento; solo la demanda de trabajadores agrícolas ha aumentado y las visas que para ese fin se han emitido por las autoridades norteamericanas son 26 por ciento más altas en 2021 con relación a 2019, la crisis alimentaria ha beneficiado a los corporativos norteamericanos y la demanda de trabajadores agrícolas no ha menguado: en 2021 se incrementó en 53 mil 97 las visas H-2A respecto a 2019, de esas visas para trabajadores agrícolas, 47 mil 858 correspondieron a mexicanos.

 

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