Marie Skłodowska Curie es, sin duda, una de las científicas más influyentes que han existido. Nacida en Polonia en 1867, Marie Curie fue precursora en el estudio de la radiactividad, sus descubrimientos revolucionaron tanto la física como la química. No obstante, su gran legado no solo se limita a sus hallazgos científicos, pues también resalta su lucha constante por obtener reconocimiento en un campo dominado por hombres, en una época con mucha desigualdad de género.
Podría suponerse que en la actualidad los prejuicios hacia las mujeres en el ámbito científico han sido superados. No obstante, en mi experiencia personal, aún he enfrentado actitudes excluyentes a lo largo de mi trayectoria educativa.
En este artículo, se mencionan las dificultades que enfrentó Curie como mujer en la ciencia debido al contexto social en el que vivía, y cómo es que su perseverancia marcó un cambio en la historia para las mujeres en el ámbito científico.
El contexto histórico
En los siglos XIX y XX, las mujeres enfrentaban barreras sociales, por lo que se veían obligadas a cumplir los roles de género impuestos. Además, las mujeres contaban con acceso limitado a la educación superior, eran excluidas de las universidades y de las sociedades científicas, lo que hacía que el ámbito científico fuera principalmente para hombres, quienes podían dedicarse por completo a sus carreras científicas, mientras que las mujeres tenían que cumplir las expectativas de la sociedad de ser esposas y buenas madres, ante todo. Esto impedía que participaran en la investigación científica de manera activa.
Lucha por la igualdad de género en el ámbito académico
Madame Curie se encontró con dificultades en todos los aspectos de su carrera científica. Desde la falta de recursos, hasta el escaso apoyo de instituciones educativas y colegas científicos. Un claro ejemplo fue el rechazo inicial a admitirla en la Academia de Ciencias, una de las instituciones más prestigiosas de Francia. Como se destaca en un artículo del Smithsonian Magazine* la exclusión de Marie Curie fue un ejemplo de la discriminación sistemática y de las barreras de género que existían hacia las mujeres en la ciencia en esa época. Durante muchos años, enfrentó la resistencia de sus colegas y del entorno académico, pues dudaban de su capacidad, por el simple hecho de ser mujer.
A pesar de vivir en ese contexto, no solo logró destacar como científica, sino que también superó los desafíos que el machismo y la exclusión le impusieron en su carrera, sin mencionar que fue madre de dos hijas.
Su colaboración con su esposo, Pierre Curie, produjo descubrimientos fundamentales que revolucionaron tanto la física como la química. Los Curie identificaron los elementos polonio y radio, y desarrollaron las bases del estudio de la radiactividad, un concepto completamente nuevo en aquel momento. Aunque inicialmente Pierre fue considerado como la figura prominente de la investigación y era a él a quien querían dar todo el mérito, se sabe que el papel de Marie fue clave en los descubrimientos.
Después de la muerte de su esposo, también enfrentó un ataque brutal por parte de los medios cuando se hizo pública su relación con el físico Paul Langevin, quien era un hombre casado. La prensa no se centró en sus logros científicos y solo utilizó su vida personal para desprestigiarla. Esta forma de manejar los hechos, refleja la manera en que las mujeres en la ciencia debían luchar por el reconocimiento profesional, así como contra la difamación pública. Las científicas eran comúnmente retratadas como figuras polémicas y problemáticas, y no se prestaba atención a sus logros académicos, mientras que los hombres recibían los elogios por sus avances, tal y como lo señala el Smithsonian Magazine*.
No cabe duda de que, en numerosas ocasiones, el trabajo de Curie fue subestimado debido a su género, como se establece en un artículo del American Institute of Physics** Sin embargo, su investigación sobre la radiactividad la llevó a recibir dos Premios Nobel, estos reconocimientos no los alcanzó de manera fácil.
Reconocimientos y su impacto en las futuras generaciones
Como se ha mencionado anteriormente, el legado de Marie Curie no solo se limita a su éxito personal ya que su perseverancia también abrió las puertas a las futuras científicas. A pesar de los innumerables obstáculos, su trabajo revolucionó el campo de la radiactividad, y gracias a su persistencia, su trabajo fue finalmente reconocido en 1911. Lo que lo hace más extraordinario, es el hecho de que se convirtió en la primera persona, hombre o mujer, en recibir dos Premios Nobel, uno en física y otro en química. Este gran logro no solo consolidó su posición como una de las mentes más brillantes de toda la historia, sino que también estableció un precedente para las mujeres en la ciencia.
Por más que este impacto fuera a nivel mundial, el reconocimiento internacional que recibió no significó que las barreras para las científicas desaparecieran. Aunque Curie fue una pionera luchando contra las barreras sociales, muchas de sus sucesoras continuaron enfrentando dificultades similares, como se detalla en un artículo de Scientifica***, el cual celebra a Curie como una figura fundamental en la lucha por la igualdad de género en la ciencia.
Cabe destacar que Curie fue un ejemplo a seguir como madre y educadora. Pues, inspiró a su hija, Irène Joliot-Curie, quien de igual forma recibió el Premio Nobel en Química en 1935 por su trabajo sobre la radiactividad.
El legado que construyó reafirma la importancia de la visibilidad femenina en la ciencia, destacando que, a pesar de que las mujeres fueron tradicionalmente excluidas, estas tienen la capacidad de sobresalir y liderar innovaciones en la disciplina científica.
Hasta la fecha, Marie Curie continúa siendo un modelo a seguir. A pesar de los avances logrados en términos de igualdad de género en la ciencia, las barreras y los estereotipos aún continúan para las jóvenes científicas.
El artículo de Scientifica*** subraya que Curie es un ícono que motiva a las mujeres a seguir sus carreras, desafiando aquellas barreras estructurales y culturales impuestas, que aún limitan su participación en algunos campos.
Su legado
Con todo lo mencionado anteriormente, es notable que Marie Curie no solo cambió la ciencia con sus descubrimientos, sino que también transformó el papel de la mujer en la ciencia. Su historia refleja perfectamente el arduo camino que recorren las mujeres para lograr el reconocimiento en campos históricamente dominados por hombres, así como su capacidad para desafiar las expectativas. Su legado seguirá siendo una inspiración para las generaciones futuras de mujeres científicas que enfrentan sus propios desafíos en el mundo contemporáneo de la investigación científica.
Marie Curie pudo demostrar que, aunque el sistema esté diseñado para excluir, la consistencia, el compromiso y el amor por la ciencia pueden abrir puertas para las futuras generaciones.
Artículos mencionados:
* https://www.smithsonianmag.com/science-nature/unheralded-women-scientists-finally-getting-their-due-180973082/
** https://history.aip.org/exhibits/curie/index.html
*** https://www.scientifica.uk.com/neurowire/celebrating-women-in-science-marie-curie-a-historic-role-model
Otras fuentes:
https://www.nobelprize.org/womenwhochangedscience/stories/marie-curie