La producción artesanal enfrenta una situación económica ambivalente, normalmente la destreza y el talento que demanda se ven opacados por la falta de reconocimiento a su labor; siendo, además uno de los sectores más empobrecidos y rezagados. Se confronta su ethos, arraigado en un mundo que valora belleza y tradición, con otro, que prioriza lo económico, las utilidades monetarias.
El paradigma del “artesano moderno” refleja una dinámica socioeconómica que tiene su origen en la evolución del artesano tradicional que ha sabido adaptarse a las exigencias de la gestión, la demanda y los intereses económicos, mientras preserva algunos elementos culturales, de identidad y dignidad. Es así que ahora el artesano del siglo XXI incorpora tecnología y moderniza sus procesos productivos para reclamar un lugar en los mercados altamente competidos y regidos por las tendencias globales. Su objetivo es mejorar sus condiciones de bienestar sin perder la conexión con el legado histórico y creativo que lo define. “El mundo moderno tiene dos recetas para despertar el deseo de trabajar duro y bien. Una es el imperativo moral de trabajar en bien de la comunidad. La otra receta recurre a la competencia” (Sennet, 2008: 23).
En México, la incorporación de nuevas tendencias de producción en el sector artesanal a menudo ocurre en circunstancias críticas. Se observan altas tasas de empleo informal, degradación de los derechos laborales, que se agudizan con el uso del outsourcing y el nearshoring, además de una mala cobertura de seguridad social y de una forzada folclorización cultural, todo esto ha consolidado un panorama en donde ser artesano bajo las concepciones tradicionales deja de ser una actividad lucrativa. Por esto, Hernández, Domínguez y Yescas (2007:81) afirman que: “Las opiniones pesimistas se centran en calificar a la artesanía como un sector pobre, con pocos conocimientos de administración y mercado, con productos de baja calidad, y sin el reconocimiento del gobierno como actividad productiva potencialmente competitiva.”
Lo anterior se ha agudizado con la competencia mundial, modificándose además las preferencias de consumo, posicionándose como competidores de la artesanía los souvenirs fabricados con alta tecnología y a gran escala, provenientes de Asia; productos genéricos o similares, más económicos y que son percibidos como alternativa por parte de los consumidores, desplazando a las artesanías a un nicho que se reduce gradualmente, con poca escalabilidad comercial y con competencia desigual, en precios y en condiciones de producción, obligando a “los artesanos a reaccionar a lo tradicional y buscar la manera de hacer mejor, más fácil y en menos tiempo su trabajo, a fin de reducir de esta manera los costos, que con los procesos ancestrales no les permiten competir con productos artesanales importados” (Domínguez, Hernández y Toledo, 2004: 148) mediante la modernización tecnológica y la capacidad adaptativa, en la medida de sus posibilidades.
Veamos el “artesano moderno” en el caso de los pedreros de Tecali de Herrera. Este municipio, ubicado a 47 kilómetros de la capital poblana, tiene una tradición ancestral por la transformación y tallado de piedras minerales, como el mármol y ónix, para la creación de productos comerciales, una actividad que ahora es el principal motor económico de la región. En esta localidad, de alrededor 24 mil personas, se estima que existen 300 unidades económicas (talleres) dedicadas a la producción de artesanías a base de piedras, con una fuerte integración familiar. Generaciones enteras han abrazado el oficio de pedrero desde edades muy tempranas y actualmente se calcula que hay 698 personas dedicadas a esta actividad, artesanos recibían aproximadamente 3 mil 400 pesos mensuales, en 2018.
En los talleres se produce una amplia gama de productos artísticos, decorativos, ornamentales, utilitarios y algunos suntuosos, que incluyen: ceniceros, llaveros, lámparas, mesas, esculturas, figuras artísticas y sacras, entre otras. Presentados en una variedad cromática tan extensa como lo es naturalmente posible, y son realizados con una gran calidad, que satisfacen exigencias de mercados internacionales. Gracias al e-comerce, las alianzas con los retailers más importantes del país, a las estrategias de mercadotecnia, la modernización técnica y de procesos de los talleres, las piezas que se producen en la localidad han traspasado fronteras nacionales, superando ya los doce millones de pesos en exportación, siendo Brasil el principal destino, con 34 por ciento, seguido de EUA con 22.1 por ciento (datos de la Secretaría de Economía, 2022).
Frente a estos datos, se revela el lado oscuro de esta loable labor: la exigencia de mayores niveles de producción con malas condiciones laborales; en los espacios de trabajo, pese a la modernización técnica, no se utilizan mecanismos de protección, p. e. el cubrebocas certificado. Al respecto, la literatura médico-científica ha establecido una relación directa entre el polvo de sílice (generado como desperdicio en el proceso de transformación de piedras) y enfermedades pulmonares crónicas como la silicosis, el cáncer y el asma (esto según la OIT).
Además, la mayoría de los talleres, de carácter familiar, son de tipo informal, por lo que no ofrecen prestaciones o cobertura social a sus trabajadores. Existiendo fuerte desigualdad por ingresos, de tal forma que un 74.1 por ciento de la población tiene algún grado de pobreza (Coneval, 2020).
Así, la situación de Tecali de Herrera presenta la trasmutación hacia el artesano moderno, con condiciones de vida precarias y alimentado con la esperanza de una vida mejor, a través de la promesa del desarrollo meramente económico, una promesa que aún no llega.
Sí, es cierto que existe el riesgo de que al integrarse a los mercados globales y al adoptar tecnologías y nuevas formas de administración, la diferencia entre un artesano moderno y un trabajador industrial pudiera desvanecerse. Sin embargo, es importante destacar que la gran diferencia del artesano moderno radica en que su actividad propone un cambio ideológico, preservando el legado ancestral y priorizando la dignidad y el bienestar por encima de lo puramente económico.
Dejamos las siguientes preguntas: ¿Habrá espacio para el artesano que se niega a dejar morir sus tradiciones y cultura en un mundo hiperestimulado y masificado? ¿El destino inminente del artesanado moderno será la folclorización y/o la creación de un nuevo sector industrial dominado únicamente por las reglas de mercado, de demanda, tendencias, lujo y banalidad como ya le ha sucedido al trabajador industrial? Es innegable que responder a estas preguntas requerirá observar la dirección que tome el gremio artesanal en los próximos años, incluso, en décadas.
Referencias
Consejo Nacional de Evaluacion de la Politica de Desarrollo Social. (01 de Enero de 2021). Datos del avance municipal Tecali de Herrerea 2020. Alcaldía Benito Juárez, Ciudad de México, México. Obtenido de https://sistemas.coneval.org.mx/DATAMUN/mapas?e=21&m=21153&c=2020&sg=4&g=26&owli=
Domínguez Hernández, M. L., Hernández Girón, J. D., & Toledo Lopéz , A. (2004). Competitividad y ambiente en sectores fragmentados. El caso de la artesania en México. Bogota: Instituto Politécnico Nacional.
Hernández Girón , J. D., Yescas León, M., & Domínguez Hernández, M. L. (2007). Factores de éxito en los negocios de artesanías en México. Oaxaca: Estudios Gerenciales.
Oidor Ruiz, M. A. (2022). Peligrosa exposición a la sílice cristalina en artesanos, desde una visión amplia del desarrollo y las condiciones laborales en la era neoliberal. El caso de Tecali de Herrera, Puebla, entre 2010 y 2022. Puebla.
Organización Internacional del Trabajo. (01 de Enero de 2015). Sistema Globalmente Armonizado De Clasificación y Etiquetado de Productos Quimicos SGA. Obtenido de Naciones Unidas:
https://unece.org/fileadmin/DAM/trans/danger/publi/ghs/ghs_rev06/Spanish/ST-SG-AC10-30-Rev6sp.pdf
Secretaría de Economía. (2022). Comercio Internacional Neto.
Obtenido de https://www.economia.gob.mx/datamexico/es/profile/geo/tecali-de-herrera#economy
Sennet, R. (2008). El artesano. Barcelona: Anagrama.
Sistema Automatizado de Información Censal. (1 de Enero de 2003-08-13). Tabulador interactivo. Obtenido de Censos Económicos: https://www.inegi.org.mx/app/saic/
Tapia, B., & Manuel. (08 de Marzo de 2022). Percepciones del artesano y su oficio. (M. A. Oidor Ruiz, Entrevistador)