El suelo representa un hábitat favorable para los microorganismos, entre los que se incluyen algas, hongos, actinomicetos y bacterias. Estos microorganismos, junto a los componentes de la microfauna, forman la llamada microbiota del suelo. La actividad y diversidad de la microbiota condiciona la fertilidad del suelo, la estabilidad y funcionamiento de ecosistemas naturales y los agroecosistemas. La diversidad microbiana es esencial para garantizar los ciclos de los nutrientes y los procesos de descomposición del material vegetal en cualquier ecosistema terrestre debido a los procesos biológicos como la oxidación, la reducción, la descomposición de materia orgánica y la mineralización, así como las interacciones interespecíficas e intraespecíficas que se establecen en el suelo.
La población encontrada está entre uno y 100 millones de microorganismos presentes por gramo de suelo, siendo las bacterias y hongos los predominantes, generando relaciones beneficiosas entre la diversidad microbiana, el funcionamiento de los suelos, la calidad de las plantas y la sostenibilidad de los ecosistemas. Por lo tanto, el funcionamiento de los ecosistemas es gobernado por la dinámica microbiana, la cual está influida directamente por los parámetros físicos y químicos del suelo.
En el Laboratorio de Microbiología de Suelos de la BUAP se está trabajando en estudios de la diversidad microbiológica en los suelos mediante dos líneas de investigación: la primera es referente a la fertilización biológica y la segunda corresponde a la biotecnología ambiental y agrícola. Se ha generado, a lo largo de 30 años de investigación, un banco de microorganismos provenientes de suelos asociados a plantas, donde se encuentran especies de importancia agrícola como Rhizobium, Azospirillum y Pseudomonas, entre otras bacterias fijadoras de nitrógeno, solubilizadoras de fosfatos y productoras de sustancias estimuladoras del crecimiento vegetal.
El cambio del uso del suelo, los desastres naturales, el crecimiento urbano, la contaminación por residuos químicos, la presencia de especies invasoras, las prácticas agrícolas y el cambio climático, han ocasionado amenazas a la diversidad microbiana del suelo, por lo que es importante incentivar y promover proyectos que ayuden a la conservación biológica del suelo mediante el desarrollo de alternativas biológicas, como lo son los inoculantes microbianos, cuya aplicación agrícola y forestal ha sido demostrada por el grupo de trabajo.
A partir de muestras de suelo y planta se cuantifican y aíslan bacterias y hongos de las diferentes regiones del estado de Puebla y otros estados del país. Los resultados obtenidos a la fecha han permitido realizar un diagnóstico de la diversidad microbiana. Por otro lado, se trabaja en el desarrollo de inoculantes microbianos de aplicación agrícola y forestal de las regiones estudiadas, lo que ayuda a rescatar, conservar y aumentar los rendimientos y las plantaciones agrícolas y forestales en campo. Se obtienen aislados bacterianos de diferentes regiones y de las plantas estudiadas y se les cuantifica la actividad de la nitrogenasa (fijación de N2), su efecto en la solubilización de fosfatos, la producción de sustancias antibióticas y la producción de reguladores del crecimiento vegetal. Se evalúa la respuesta en plantas de los inoculantes bacterianos desarrollados en condiciones de invernadero y campo con la selección los tratamientos con mejores rendimientos para su aplicación extensiva en cultivos agrícolas y forestales en las diferentes regiones del estado. Además, se analiza y cuantifica el contenido de contaminantes del suelo como plaguicidas, metales pesados e hidrocarburos con respecto a la normatividad mexicana vigente en las muestras de suelo de la diferentes regiones del estado de Puebla, logrando conocer el impacto de contaminantes en las poblaciones microbianas de los suelos de estudio.
Literatura consultada
Camelo et al., 2011, “Mecanismos de acción de las rizobacterias promotoras del crecimiento vegetal”, Revista Corpoica-Ciencia y Tecnología Agropecuaria. 12:159-166.
Carcaño-Montiel et al., 2010, “Microorganismos benéficos y efectivos para la agricultura mexicana” 4º. Simposium de Química ambiental. RN-ICA. 17-23 http://cienciasdelsuelofigueroatorres.blogspot.mx/
López-Reyes et al., 2012, Estudio de las poblaciones microbianas asociadas a la rizósfera de Pinus patula. Tópicos edafológicos de actualidad. SMCS y UAZ. 53-58.