La migración en México tiene una antigüedad de más de un siglo, se caracteriza por su flujo ininterrumpido y llama la atención por ser el fenómeno de su tipo con mayor antigüedad en el mundo. Inicia cuando principia el siglo XX y Estados Unidos emplea mano de obra mexicana mediante un sistema de contratación privado y semiforzado al que se le llamó enganche debido a que los norteamericanos contrataban a los trabajadores mexicanos en nuestro territorio. Por esta razón, esta fase migratoria se conoce como etapa del enganche1, que inicia en 1900 y se extiende hasta 1920, tiempo en el que la demanda estadounidense de trabajadores se incrementa porque Estados Unidos ingresa a la Primera Guerra Mundial y deja de prescindir de mano de obra inmigrante europea; adicionalmente, la Revolución Mexicana contribuye con sus oleadas de refugiados. Los estados de Jalisco, Michoacán, Guanajuato, Durango, Zacatecas, San Luis Potosí, Aguascalientes, Colima y Nayarit son las primeras entidades en las que se observa la migración por enganche; por ello conforman lo que se conoce como la región migratoria histórica. Posteriormente, de 1921 a 1941, México vive la fase de las deportaciones, en la que Estados Unidos implementó tres ciclos de retorno masivo y uno de deportaciones cotidianas de mexicanos.
De 1942 a 1964 se desarrolla la etapa migratoria conocida como periodo bracero, que tuvo su origen en la demanda estadounidense de trabajadores, primero por su ingreso a la Segunda Guerra Mundial y después por el auge que la economía estadounidense experimentó en la posguerra. Esta etapa se caracterizó porque los migrantes fundamentalmente fueron varones, de origen rural y destino agrícola, así como por la legalidad de la migración vía contratos temporales. Durante el periodo bracero se inician de manera importante en cantidad los cruces fronterizos desde la región migratoria central2 de México, integrada por el Distrito Federal, Guerrero, Hidalgo, Estado de México, Morelos, Oaxaca, Querétaro, Tlaxcala y Puebla. De cada 10 mexicanos que cruzaron la frontera norte en este periodo, 1.3 fueron de la región central y el estado de Puebla aportó 1.28% del total de los migrantes mexicanos con destino a Estados Unidos3.
En la Mixteca poblana4 nace la migración internacional de este estado, por ello es posible conocer mixtecos que residen en Estados Unidos desde hace cinco o seis décadas, que se casaron en Estados Unidos y cuyos hijos y nietos nacieron en ese país. Aún hoy es posible recorrer la mixteca y encontrar braceros que conservan sus credenciales que los identificaron como trabajadores legales y conocer sus historias del proceso de contratación, transporte y residencia en Norteamérica. Los resultados de la “Encuesta a Hogares para conocer la incidencia de la migración internacional en Chila de la Sal y en Chinantla, Puebla”5, realizada en 2005, son una muestra de los movimientos migratorios de dos comunidades de la mixteca. En estos resultados podemos ver que los mixtecos que cruzaron la frontera norte en el periodo bracero fueron fundamentalmente varones, con promedio de edad de 27 años, que dos de cada tres contaban con documentos migratorios; que la inserción laboral de la mayoría se realizó en el sector agrícola y su destino principal fue California.
El ascenso de la carrera migratoria de la mixteca poblana continuó durante la siguiente fase migratoria que se desarrolló de 1965 a 1986 y se conoce como etapa de los indocumentados, ya que Estados Unidos tomó la decisión de finalizar los convenios que permitieron la inmigración legal de mexicanos. A partir de 1987 con el inicio de la vigencia de la Immigration Reform and Control Act (IRCA) inicia para México el quinto periodo migratorio del siglo XX, conocido como de la legalización y la migración clandestina. A través de un proceso de amnistía amplio (LAW) y el programa de trabajadores agrícolas especiales (SAW), Estados Unidos permitió la legalización y el establecimiento de más de 2.3 millones de mexicanos indocumentados6. En la gráfica que se muestra a continuación se puede observar la cantidad de emigrantes internacionales del estado de Puebla, de 1990 a 2010:
Sobre los mixtecos de Chila de la Sal y Chinantla podemos concluir: iniciaron su salida del país durante el periodo bracero, fase en la que llegaron a California, aunque actualmente su destino privilegiado es Nueva York y en menor medida Chicago y New Jersey. La migración, masculina en sus inicios, ahora tiene un componente femenino cada vez mayor, ya que 30% de los migrantes son mujeres. Inició siendo fundamentalmente legal, pero actualmente 82% de los chileños y 75% de los chinantecos llegan a Estados Unidos sin documentos. Su inserción laboral es fundamentalmente en los servicios, aunque también se desempeñan como obreros y realizando otro tipo de actividades como choferes, empleados en la construcción, comerciantes en pequeña escala; no todos tienen propósitos de trabajo al cruzar la frontera ya que 10% de los migrantes de ambas comunidades se fueron a Estados Unidos en plan de turistas y uno de cada 10 chinantecos se dedica a estudiar en el país de destino; el promedio de edad es de 24 años; y mientras que los chileños tienen un promedio de 6.4 años escolares cursados, los chinantecos tienen 8.5 años.
El impacto de la migración internacional a nivel municipal se ha captado en los Censos de Población de 2000 y 2010 y con la información obtenida se ha generado el Grado de Intensidad Migratoria México-Estados Unidos, que muestra seis niveles de la incidencia migratoria: nulo, muy bajo, bajo, medio, alto y muy alto. Los cambios en los 217 municipios del estado de Puebla, de 2000 a 2010 se pueden observar en la gráfica 2, en la cual podemos apreciar que actualmente no hay municipios sin impacto de la migración y que creció el número de municipios con grado bajo, medio y alto.
Esta información nos conduce a preguntarnos por los cambios de los grados de intensidad migratoria 2000 y 2010 a nivel de cada región del estado y cómo esperamos que se comporte la migración en los próximos años. Esto lo podremos analizar en un próximo artículo.
Notas
1 La determinación de los periodos migratorios es tomada de Jorge Durand y Douglas S. Massey (2003).
2 Además de las regiones migratorias histórica y central, Durand y Massey (2003) identifican la región fronteriza (integrada por los estados de Baja California, Baja California Sur, Coahuila, Chihuahua, Nuevo León, Sinaloa, Sonora y Tamaulipas) y la región sureste, conformada por las entidades de Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán. La primera tiene la particularidad de que siempre ha enviado mexicanos a Estados Unidos y la segunda inicia su carrera migratoria cuando finaliza el siglo XX.
3 Los estados de la región mixteca de México (Puebla, Oaxaca y Guerrero) fueron las entidades de la región central que más migración internacional experimentaron durante el periodo bracero, pues 7% de los migrantes mexicanos salió de este territorio.
4 La mixteca poblana es una de las siete regiones socioeconómicas del estado de Puebla, las otras regiones son Sierra Norte, Sierra Nororiental, Valle de Serdán, Angelópolis, Tehuacán y Sierra Negra y Atlixco y Matamoros.
5 Esta Encuesta fue realizada por la autora de este artículo para obtener información utilizada en la tesis doctoral Redes y organizaciones de migrantes. Actores sociopolíticos transnacionales de la mixteca poblana, presentada en El Colegio de México, el 6 de febrero de 2009. La información sobre migración en la mixteca para este artículo es tomada de esta encuesta.
6 Obviamente, hubo una cantidad importante de migrantes que no se favorecieron con la amnistía, pero que tenían que sujetarse a las demandas legales que les exigían algún tipo de documentación, por lo que tener documentos (no importaba que fueran falsos) fue una característica de los migrantes de esta fase.