Las imágenes astronómicas: lo que registramos antes del Hubble (Primera parte)

Observar el cielo y registrar lo observado ha evolucionado desde los grabados de eventos astronómicos en las paredes de las cavernas, o a través de pinturas rupestres —cuyas representaciones aún pueden ser vistas en algunos lugares en el mundo—, hasta el procesamiento digital de imágenes de instrumentos que se encuentran muy lejos del observador, como las sondas espaciales o los observatorios en órbita. Uno de ellos es nuestro festejado Hubble.

La impresión que los eventos astronómicos dejaron en nuestros antepasados los llevó a representar de diversas maneras lo que observaban. Hace ya más de seis mil años, fue grabado en piedra un acontecimiento poco común en el cielo: La explosión de una supernova. Se ha realizado un montaje interpretativo donde lo grabado en piedra, descubierto en la región de los montes Himalaya, parece ser en realidad un mapa: Se representan nuestro Sol y otra estrella muy brillante: la Super-nova. (Yatoo, et. al., 2013) (1)

Figura 1

Figura 1

Un caso más reciente es el de Peñasco Blanco, en Norteamérica, la gran casa chacoana de la civilización Anasazi. La pintura en un peñasco denominada la Platografía de la Supernova pudo haber plasmado la observación de la famosa supernova de 1054, cuyo remanente es la Nebulosa del Cangrejo, M1. En esa pintura, sorprendentemente bien conservada, se puede ver la Luna en un cuarto, junto con la estrella invitada, y presumiblemente, el autor dibujó su mano, como si se tratara de su firma. (Imagen 1)

 

Figura 2

Figura 2

Ya en la época del surgimiento de las más antiguas civilizaciones del mundo, también se consignan representaciones de  observaciones astronómicas. Un buen ejemplo es el de la cultura Maya, creadora del códice de Dresden, donde se registraron cálculos de las fases de Venus, los eclipses de Sol y de Luna, y particularmente la tentativa de relación de los períodos sinódicos de Mercurio, Venus y Marte con la rueda sagrada de 260 días (Smiley, 2016) (2) (Imagen 2)

 

Figura 3

Figura 3

Mención especial merece el trabajo de los astrónomos árabes. Ellos asimilaron y después mejoraron la astronomía griega. Sus observaciones se fundamentaron en la modificación de los instrumentos de observación, particularmente astrolabios y relojes, y con estas observaciones, que eran más precisas, modificaron el sistema del mundo, que había sido concebido de manera mística y religiosa por los griegos.

Todos estos ejemplos tienen algunos aspectos en común: Los registros, grabados o dibujados, hacen alusión a sucesos extraordinarios en el firmamento, o atienden a la Astronomía posicional. Todo ello, resultado de la observación a simple vista de los astrónomos.

 

 

Figura 4

Figura 4

En la Europa renacentista, grandes astrónomos construyen una nueva concepción del universo. El trabajo dedicado y sistemático de Tycho Brahe sienta las bases observacionales de los nuevos modelos astronómicos, cuyos planteamientos filosófico-científicos fueron enunciados por Nicolás Copérnico. Tycho, en 1572, observó y registró la aparición de una supernova en la constelación de Casiopea. El dibujo y las anotaciones realizadas fueron publicadas en su libro “Nova Stella”. (Imagen 4)

 

 

 

Figura 5

Figura 5

El año 1605 es en el que Galileo Galilei revoluciona la concepción del Universo, al perfeccionar un telescopio de 30 aumentos. Él dibujó sus observaciones, que posteriormente publicó en su obra “Sidereus Nuncius”, en 1610. Los dibujos incluyen, entre otros,  al relieve de la Luna y las manchas del Sol. Los dibujos de Galileo marcan la época en que se comenzó a cambiar la perspectiva de la humanidad sobre nuestra identidad y nuestro lugar en el mundo (Mc Caughrean, 2017, en BBC mundo) (3). (Imagen 5)

 

 

Figura 6

Figura 6

También Galileo observó a Júpiter. Estas observaciones fueron trascendentales. Él describe a los Satélites del planeta como estrellas que formaban una línea que atravesaba a Júpiter. Poco después se da cuenta que los puntos de luz estaban orbitándolo. Determinó que lo que veía era un conjunto de cuerpos planetarios y no estrellas. Había otro sitio en el universo donde los objetos no orbitaban el Sol, sino otro cuerpo celeste. Sus palabras revelan el asombro que sintió: (Imagen 6)

“Doy gracias a Dios, que ha tenido a bien hacerme el primero en observar las maravillas ocultas a los siglos pasados. Me he cerciorado de que la Luna es un cuerpo semejante a la Tierra… He contemplado una multitud de estrellas fijas que nunca antes se observaron… Pero la mayor maravilla de todas ellas es el descubrimiento de cuatro nuevos planetas (cuatro satélites de Júpiter)…”

El telescopio de Galileo y el uso que Galileo hizo de él inició una nueva era en la Astronomía.

 

 

Referencias

(1) Yatoo, Mumtaz A; Vahia, M N; Iqbal, Naseer. (2018) The Journal of Central Asian Studies; Srinagar Tomo 25, N.º 1,  133-145,II.

(2) Smiley, C. H. (2012). Interpretación de dos ciclos en el Códice de Dresde. Estudios de Cultura Maya, 4.

(3) Por qué los primeros dibujos de la Luna de Galileo Galilei revelan una nueva era en la visión del universo – BBC News Mundo. (2020). Recuperado 20 de septiembre de 2020, de https://www.bbc.com/mundo/noticias-42202220

 

 

 

Para los curiosos

Abetti, G. (1990) “Historia de la Astronomía”, México, FCE

Averbuj, E. (1990) “Con el cielo en el bolsillo: La astronomía a través de la Historia”, España, Ediciones de la Torre.

Galilei, G. (1978) “El mensajero sideral” México, Balsal Editores.

 

 

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