Estudiar la vejez, ¿para qué?

Hilario Perez Corona. Académico de la UATx. Jubilado

Hilario Perez Corona. Académico de la UATx. Jubilado

El creciente envejecimiento poblacional en México en las últimas décadas ha planteado la necesidad urgente de generar estudios que permitan reconocer los tipos de vejeces que predominan en la población, buscándose con ello por una parte desmitificar la existencia de una sola vejez; por otra, determinar las características propias de las mismas, a la par de reconocer los indicadores que a lo largo del curso de vida inciden en el buen envejecer, todo ello con la finalidad de generar políticas públicas que minimicen los riesgos característicos de la vejez.

González y Ham-Chande (2007) han identificado la existencia de cuatro tipos de envejecimiento, todos ellos caracterizados e interrelacionados por niveles de funcionalidad y/o dependencia:

“Envejecimiento ideal: las personas de este grupo son completamente capaces en las actividades básicas e instrumentales de la vida diaria; no se les ha diagnosticado ninguna enfermedad crónica; se perciben en muy buen estado físico; su deterioro cognitivo no está presente, y llevan un estilo de vida positivo, es decir, no consumen alcohol o tabaco y realizan actividad física.

Envejecimiento activo: a estas personas se les ha diagnosticado alguna enfermedad crónica; perciben su estado de salud regular; tienen deterioro cognitivo, y su factor de riesgo es bajo.

Envejecimiento habitual: estas personas presentan más de una enfermedad crónica; perciben su estado de salud regular; tienen una ligera incapacidad funcional que no causa dependencia; su deterioro cognitivo puede ser ligero o no estar presente, y tienen factores de riesgo bajo o medio.

Envejecimiento patológico: las personas de este grupo presentan una mala autoevaluación del estado de salud; tienen deterioro cognitivo y se les han diagnosticado enfermedades crónicas. Los factores de riesgo en este tipo de envejecimiento no hacen diferencia, ya que el estado de salud está afectado en varias dimensiones, cualesquiera que sean los hábitos y comportamiento. En este grupo se encuentran esencialmente personas cuya sobrevivencia depende de terceros” (p. S450).

Con lo anterior y a la par de otros estudios se ha podido constatar que el envejecimiento poblacional se encuentra caracterizado de manera específica por la presencia de dependencia social y económica ocasionada por la vulnerabilidad que puede experimentar una persona a lo largo de su curso de vida; en la mayoría de los casos estas dependencias estarán interrelacionadas e incrementarán el nivel de discriminación a la que se enfrentará la persona en su etapa de vejez “en sus repercusiones sociales y económicas, la vejez produce un regreso a la dependencia de la familia en particular y de la sociedad en general, con sustanciales demandas de manutención y cuidado” (Ham-Chande,1999, p.45).

Si bien en las líneas anteriores ya se ha señalado que existen diferentes vejeces, para poder comprender cómo se viven y en qué condiciones, se hace necesario estudiar grupos poblacionales específicos.

Lo que en la propia academia ha llevado a cuestionar, ¿cómo envejecen los académicos de alto nivel1 en México? ¿Qué dependencias y riesgos de la vejez se presentan con mayor preponderancia en los académicos de alto nivel? ¿Cuáles son las implicaciones de envejecer y estar en activo desarrollando funciones sustanciales para mantenerse en el Sistema Nacional de Investigadores (SNI), Conacyt? y ¿Cuáles son los motivos y/o condiciones que conllevan a los académicos de alto nivel a no jubilarse?

Bajo estos referentes, en el año 2019, se inscribe a Ciencia de Frontera (Conacyt), el proyecto denominado “Prospectivas y escenarios sexenales sobre el envejecimiento demográfico en relación a la seguridad social, el sistema de pensiones, la atención a la salud, y cuidados personales, como problemas críticos de interés nacional”, el cual es un proyecto multidisciplinar liderado por Ham-Chande, en el que participan como instituciones corresponsables el Instituto Nacional de Geriatría, el Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad Nacional Autónoma de México y  el Cuerpo Académico UATLX-CA-240 Ciencias del Envejecimiento de la Universidad Autónoma de Tlaxcala, así mismo cuenta con investigadores participantes de la Universidad Autónoma de Chiapas, del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social, de la Universidad de Colima y de la Universidad Autónoma del Estado de México.

Este proyecto se propone estudiar a distintos grupos, dentro de los que destaca el conformado por académicos de alto nivel, con el objeto de probar conceptos, teorías y métodos que incluyan enfoques sobre el curso de vida, debido a que se plantea como meta la construcción de prospectivas sobre las principales formas de dependencia social, económica y de salud presentes en la vejez.

Por ello se requiere explorar en los académicos de alto nivel el tipo de envejecimiento que presentan, si desarrollan algún tipo de dependencia y cómo esta se manifiesta en tres áreas principales: 1) Seguridad social y pensiones de retiro, 2) Atención a la salud y 3) Necesidad de cuidados personales.

Es así que para comprender el proceso de envejecimiento de los académicos(as) de alto nivel pertenecientes al SNI se reconstruirán sus trayectorias de vida, haciendo énfasis en las pensiones de seguridad social y jubilación, la atención de la salud para prevenir enfermedades crónicas, discapacidades y autocuidado.

De esta manera se busca analizar integralmente las causas y consecuencias de la dependencia o en su defecto demostrar cómo el desarrollo de las actividades académicas promueven la óptima funcionalidad de los académicos de alto nivel y por ende se mantiene en un envejecimiento ideal, activo o habitual.

 

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  • Se definen como académicos de alto nivel a aquellos que desarrollan las funciones sustantivas de docencia, gestión, tutoría e investigación y son reconocidos por el Sistema Nacional de Investigadores-Conacyt en los niveles 1, 2, 3 o emérito.

 

 

Referencias

 

González, C. y Ham-Chande, R. (2007). Funcionalidad y salud: una tipología del envejecimiento en México. Salud Pública.49(4), pp.S448-S458. https://www.scielo.org.mx/pdf/spm/v49s4/v49s4a03.pdf

 

Ham-Chande, R. (2019). Proyecto “Prospectivas y escenarios sexenales sobre el envejecimiento demográfico en relación a la seguridad social, el sistema de pensiones, la atención a la salud, y cuidados personales, como problemas críticos de interés nacional”, COLEF- Ciencia de Frontera-Conacyt.

 

Ham-Chande, R. (1999). Conceptos y significados del envejecimiento en las políticas de población. En Consejo Nacional de Población, Envejecimiento demográfico en México: retos y perspectivas. Por una sociedad para todas las edades (pp. 41-53). CONAPO. http://www.conapo.gob.mx/en/CONAPO/Envejecimiento_demografico_de_Mexico_Retos_y_Perspectivas